Ph: Melina Gómez
Por Mario Oliveri
Canoas de maderas, aferradas a un junco lateral.
La mirada dirige hacia otras canoas, allí nos observan.
Si yo supiese remar ganaría a la corriente,
y no tendría que llamarte, para que cruces tu canoa.
A mi vista, las burras negras sospechan de nosotros,
y entre primates se tiran mierda caliente.
Al frente de donde estamos ahora, sin canoas de maderas,
aferradas al puertillo lateral, al otro lado de donde estuvimos.